sábado, 8 de enero de 2022

104 AÑOS DE LA REVUELTA DE LAS FAENERAS DE MÁLAGA

 

 

El 9 de enero de 1918 un nutrido grupo de mujeres, formado por unas ochocientas faeneras, se echaron a las calles de Málaga exigiendo al gobernador que diera solución el elevado precio del pan y el pescado y a restringir las exportaciones. El grado de movilización femenina fue en aumento en las siguientes jornadas, hasta el punto de que el propio Ayuntamiento se ofreció a mediar entre los intereses de la población y los de los productores y exportadores.

 El crecimiento de la tensión desembocó en una asamblea multitudinaria celebrada en el local de la Juventud Republicana, en la calle de Beatas, en la que intervinieron líderes de las sociedades obreras y varias mujeres que estaban a la cabeza de los grupos femeninos: Concepción Mesa, Dolores Balaguer, Antonia Jaime y María Valdés. Se acordó celebrar una manifestación al día siguiente para exigir soluciones al problema de la carestía, que amenazaba la supervivencia de muchas familias populares.

El día 14 por la mañana grupos de mujeres se encargaron de requisar cargas de pescado y patatas para venderlas en Pescadería y en el Mercado Central, entregando el importe de su venta al gobernador como muestra de su honradez. Contaba el citado diario que para trasladar la mercancía incautada en la estación de ferrocarril las mujeres tomaron un camión con el siguiente resultado:

 “Como se disponían a guiar el camión, oponiéndose a que el conductor lo hiciera, firme en su deseo de que no le ayudasen los hombres, y en vista de la imposibilidad de dar marcha al automóvil por desconocimiento de su mecanismo, descargaron los bultos, trasladándolos a los mismos carros que los llevaron a la estación”.

Aquel día las calles amanecieron enarenadas, señal de la prevista salida de la caballería. Al mediodía, las mujeres procedentes de los barrios malagueños (Perchel, Trinidad, Victoria, Capuchinos, Huelin), se reunieron en la Alameda de Colón y a continuación se dirigieron en manifestación hasta la Alameda y la Plaza de la Constitución, portando carteles que decían:


 “Abajo la carestía de subsistencias”, “Queremos pan a cuarenta céntimos”, 

  “Vivan las mujeres unidas”.

En la Aduana, el gobernador se entrevistó con una comisión y se limitó a recomendar que se disolvieran. Poco después comenzaron las primeras cargas de la Guardia Civil en la calle de Larios y la Acera de la Marina. En el muelle, hubo una cuando varias mujeres abrieron sacos de harina, a la que respondieron arrojando piedras sobre los guardias. Las cargas de la caballería se repitieron en la Alameda y el Parque y el balance de víctimas fue de cuatro muertos (de los que dos eran mujeres, una llamada Francisca Jiménez García y otra sin identificar) y dieciséis heridos. En los días siguientes la ciudad estuvo tomada por el Ejército y la Guardia Civil, y el gobernador prohibió las manifestaciones y las reuniones de más de tres personas, aunque no pudo evitar una huelga general Memoria de Mujeres en las calles de Málaga Portada del diario “El Regional” del 15 de enero de 1918 que duró cinco días. Estos sucesos tuvieron repercusión nacional y, finalmente, el gobernador fue cesado dos meses después.

 La revuelta de las Faeneras no fue un caso aislado, ya que motines similares tuvieron lugar en otras ciudades españolas poniendo de manifiesto  el funcionamiento de las redes solidarias de mujeres en momentos de crisis.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

  👉👉RIDICULIZANDO A LAS MUJERES: COMO TODA LA VIDA. El mundo de los micromachismos: ‘DOY UNA NOTICIA A UNA CHICA DE LA QUE SOY RESPONSA...